En España, todo propietario de un vehículo a motor tiene la obligación de estar asegurado y disponer de, al menos, un seguro de Responsabilidad Civil que cubra los posibles daños a terceros. Es decir, que, como propietario de un coche, hay que contratar y mantener en vigor una póliza que incorpore la responsabilidad civil del conductor, la más básica dentro de la oferta de seguros de automóviles, pero que resulta imprescindible para poder circular por la vía pública sin ser sancionado. Gracias a ella, es posible hacer frente a las posibles reclamaciones que se reciban por parte de otras personas como consecuencia del uso del vehículo.
Si se produce un accidente al volante, algo que técnicamente se denomina siniestro, con independencia de si alguna de las dos partes no tiene seguro, hay que rellenar siempre un parte amistoso con los datos de los conductores y de los vehículos implicados y, en nuestro caso, notificarlo a la aseguradora, que será la encargada de reclamar los daños y notificarlo a las autoridades pertinentes.
Es muy importante también recoger con la mayor precisión posible los datos de los demás involucrados en el accidente porque la compañía solicitará esa información. En el caso de que, por ejemplo, la persona que ha ocasionado el accidente huya del lugar, lo más recomendable es comprobar con personas cercanas al siniestro si alguien han visto quién fue y si pueden ayudar de alguna manera.
Además de rellenar el parte, después de tener un accidente con el coche es importante llevar a cabo otros pasos, como comprobar el estado de salud tanto de los ocupantes del vehículo en el que viajábamos como de los del otro automóvil, colocar el automóvil donde menos moleste para el tráfico (para lo que hay que señalizar correctamente la zona para evitar posibles accidentes, equipándose con el chaleco reflectante, encendiendo las luces de emergencia y colocando los triángulos de señalización homologados a 50 metros en la parte delantera y a 100 metros en la parte posterior conforme al sentido de la marcha) y llamar si es necesario a los servicios de emergencia.
Por lo que pudiera pasar, y más si es el otro vehículo no estaba asegurado, es aconsejable realizar el mayor número de fotografías posible a través del teléfono móvil, ya que es muy probable que aporten una importante información a nuestra aseguradora para realizar con éxito la reclamación posterior.
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