En la primera mitad del año los incendios en las industrias españolas registraron un nuevo aumento en torno al 12%. Es cierto que en las grandes industrias se producen más siniestros de este tipo, pero las tiendas y comercios deben incrementar su precaución porque la situación de crisis se traduce en un aumento del número de incendios por una razón clara: cuanto menores son los ingresos, más se reducen las inversiones en seguridad.
La principal advertencia que lanza la Asociación Española de Sociedades de Protección Contra Incendios (Tecnifuego-Aespi) se dirige especialmente a las tiendas y comercios para que cuenten con instalaciones y equipos de detección de incendios que cumplan con la legislación vigente. Sobre todo si se trata de establecimientos de pequeño o mediano tamaño porque si se produce un incendio y los equipos de protección son escasos, no son adecuados, o están mal mantenidos, el coste global puede ser tan elevado que los negocios pueden acabar cerrando sus puertas.
Por tanto, la seguridad de comercios pasa por una inversión adecuada en el mantenimiento del negocio ante un eventual incendio.
