Además del impacto del temporal de nieve de Filomena y las heladas posteriores, éste está siendo uno de los inviernos más fríos que se recuerdan, lo cual puede afectar al funcionamiento de nuestro vehículo de diversas formas.
Quality Brokers les ofrece a continuación una serie de consejos para mantener el coche a punto durante el invierno:
- Batería. Las variaciones bruscas de temperatura pueden afectar a la batería, reduciendo su vida útil. Los vehículos actuales tienen cada vez más consumidores eléctricos que demandan energía constantemente lo que hace aconsejable revisar su estado aunque el vehículo esté parado mucho tiempo. Por eso, es conveniente en estos casos desconectar la batería o, en su defecto, arrancar el vehículo tres o cuatro veces a la semana.
- Líquidos del vehículo. También se aconseja revisar el estado de los líquidos del vehículo que, aunque aguantan temperaturas bajo cero, pueden llegar a congelarse en situaciones de frío extremo como la actual.
- Cristales. A la hora de descongelar los cristales no hacerlo nunca con agua caliente ya que puede llegar a quebrarlos; mejor usar la climatización del propio coche y, si con esto no es posible, utilizar una mezcla de agua con alcohol.
- Limpiaparabrisas. Revisar el estado de los limpiaparabrisas y nunca los activarlos cuando el cristal esté helado.
- Cadenas. Durante inviernos como este, en muchas carreteras, incluso de poblaciones, es obligatorio el uso de cadenas. Lo primero que hay que saber es que se deben poner en las ruedas motrices del coche (si no se sabe cuáles son, está en el manual del vehículo). Si son cadenas metálicas, hay que estirarlas para evitar que estén entrelazadas, después se estira el cable de acero por la parte trasera de la rueda y se engancha en ambos extremos. Tras esto se coloca y estira la cadena rodeando el neumático por la parte que hace contacto con el suelo. Por último, se enganchan todos los tensores de la parte delantera para fijar las cadenas. Finalmente, se debe mover el vehículo unos centímetros para comprobar que están bien colocadas. Si son de tela, se empieza por la parte de arriba para después cubrir toda la superficie que no está en contacto con el asfalto. A continuación, el conductor tendrá que mover el coche para cubrir la parte que faltaba.
- Neumáticos de invierno. Una alternativa a las cadenas son los neumáticos de invierno, muy utilizados en el norte de Europa, pero escasamente difundidos en España. Con su uso, la nieve en la calzada aumenta la adherencia de estos neumáticos a la carretera.
- Control del coche. Si se va a conducir por carretera, es conveniente desactivar el control de velocidad de crucero ya que, en caso de aquaplaning es mejor tener el control total del vehículo.
- Marchas largas. Conducir con nieve o hielo implica reducir la velocidad, pero lo verdaderamente esencial es ir con la marcha más larga posible para no perder adherencia al traccionar. Salvo si se ha de bajar una cuesta; en este caso se debe ir con la marcha más corta para que sea el propio motor el que retenga al coche.
- Velocidad. Se debe circular ante nieve o hielo a menos de 40 km/h y con suavidad para que no patinen las ruedas. Además, para no perder el control del vehículo, hay que evitar acelerar o frenar de forma brusca.
- Distancia de seguridad. Aunque es muy poco probable encontrarse muchos coches cuando la carretera está en estas condiciones, no es imposible y alejarse de ellos y mantener una importante distancia de seguridad es clave para evitar accidentes. Cuando el asfalto está en estas condiciones, la capacidad de reacción y de frenada se reduce, por lo que si está alejado de otros vehículos, ayudará a evitar algunos sustos.
- Luces. Es conveniente llevar las luces incluso cuando sea de día, ya que mejoran la visibilidad del vehículo. Pero, cuidado, porque a veces estas luces en contacto con las superficies nevadas o heladas pueden hacer daño a la vista de otros conductores y provocar que pierdan visibilidad.
- Por dónde circular. Circular por las rodadas que han hecho otros coches es una forma muy inteligente de circular por la nieve, ya que estará más compactada y será más sencillo y seguro conducir por ahí.
- Preparar el viaje. Antes de ponerse al volante en estos días de nevadas y heladas, hay que consultar el estado de las carreteras por las que circular, ver vídeos sobre cómo se ponen cadenas del coche, consultar el manual de instrucciones del vehículo y revisar bien que el coche está en perfectas condicione, especialmente que el depósito está lleno de gasolina. Además, como medida de prevención, es aconsejable repostar y llenar el depósito y contar con un ‘kit de supervivencia’ que contenga agua, alimentos, linterna, batería recargable, y ropa de abrigo.
- Subviraje y sobreviraje. En caso de perder el control del coche pueden pasar dos cosas y se debe actuar de formas distintas: subviraje (el coche gira de menos) y se debe levantar el pie del acelerador para recuperar la tracción. En el sobreviraje (gira de más) se levanta el pie también pero se debe acompañar contravolantando en el sentido contrario al que haya girado el coche.